Mientras el ascensor subía iba pensado que ya podría ser bueno el masajista que me había recomendado mi prima, porque sentía un gran dolor. Ya en la planta 10 toqué el timbre…, se abrió la puerta…¡¡ y… apareció un tío espectacular!! ¡No era posible que ese fuera el masajista…!
Seguramente me había equivocado de planta…, mire a mi alrededor para asegurarme y el intuyó mi desconcierto (seguramente no era la primera vez que le sucedía);…me dijo que pasara con una sonrisa seductora (por si le faltaba algo también tenía la sonrisa seductora), entré…
En la sala con una voz profunda y sugerente me pregunto qué era lo que me pasaba… (La voz…, también la voz estaba de muerte).
Le explique que había tenido un accidente y que me habían aconsejado masajes para recuperarme mejor, porque todo era cuestión de contracturas y cervicales…, después de una pequeña charla, me preguntó qué era lo que me dolía y le explique: que me dolía todo el cuerpo, desde los pies hasta la nuca, porque el golpe había sido tremendo y con los nervios al levantarme me torcí un tobillo.
De modo que después de quitarme la ropa y colocarme sobre la camilla él empezó con su masaje terapéutico y yo a pensar en mis cosas…
Después de casi una hora me dijo que ya no podría hacer más, de lo contrario mañana tendría molestias… y expresó su extrañeza por no observar ningún moratón en mi cuerpo con semejante accidente…
Vaa…! ¡Pero mira en lo que se va a fijar! ¡Menuda tontería!
Le comenté que yo también estaba sorprendida y le pedí cita para la próxima semana,…anotó la hora muy despacio, y con un pequeño gesto y una mirada nos despedimos, pues las palabras parecían estar de sobra.
De nuevo en el ascensor un sonido extraño me aturdió, por un momento me desorienté…
Una voz repetitiva me preguntaba… ¿estas mejor? Ehhh!!!.... ¡despierta que ya son horas!
Abrí los ojos y…¡¡volví a la cruel realidad!! Estaba en una camilla del ambulatorio…, me habían suministrado un calmante muy fuerte porque me había puesto nerviosa al resbalar en el suelo mojado y torcerme un dedo contra la pared…
Miré a la enfermera…y con cara de mucho “sufrimiento” le dije: “¿oye no podrías darme otro calmante de esos? ¡¡ Es que todavía me duele un montón!!”…. Su respuesta más que lógica fue: “no seas quejicas, ¡pero si no fue nada!, sólo estabas muy nerviosa…,¡¡ ala!! Arriba y para casita a descansar”.
¡¡Qué asco de vida!! Son mejores los sueños que la realidad! Bueno…!¡¡a lo mejor mis sueños son premonitorios!! De modo que llamé a mi prima y le pedí la dirección de su masajista…
Salí del ascensor en la planta 10…, toque el timbre y la puerta se abrió… ¡¡Pues no!!... ¡Mis sueños no son para nada premonitorios!
…La masajista me mandó pasar y en la sala me preguntó qué me pasaba…, le dije que me había torcido un dedo y me dolía un poco al moverlo…
30 comentarios:
Habra que buscar otro. Muy bueno, me lo habia creido
Un abrazo
Amiga, si esa foto es tuya, no puedo sino quitarme el sombrero...
Bellisima...
Y ahora a leer el texto...
Muy, pero que muy, buen relato... Me ha encantado, con esos saltos que pegas de un mundo a otro y que hacen que estemos en ascuas...
Un abrazo fuerte
ANTIQVA la fotografía es mía la de la playa, pero la chica es un montaje, no soy yo pertenece a las imágenes de Google, ¡ya me gustaría! Pero no nos parecemos en nada porque yo soy morena... jajajaja.
Muchos besos.
Jajjaja,mira que...el temita del masajista tan buenísimo, y la sujerencia de la chica de la fotografía¡¡que por cierto está genial!!,una que ya se imagina el sarao que ahí se podría montar...pero como al final fué todo efecto de la drogita que te dieron y parece que ese efecto fue de lo más complaciente...para la próxima no te rompas solo un dedo,prueba con algo más a ver lo que te ocurre ,y nos lo cuentas...jajaja.
Si es así, yo también quiero que me den de ese calmante mágico.
Besitos y si encuentras un buen (buenísimo...) masajista de esos del sueño,avísame porfaaaa.
El bombón de la foto es Campoazul, lo digo yo que la conozco y para nada es morena... Es un bombonazo, aunque le cueste reconocerlo.
Yo, prefiefo algunas veces los sueños, sobre todo en los que se refieren a los compañeros de trabajo porque donde yo estoy no se salva ni uno... jajajajaja.
Me encantó esta reposición porque no lo había leído y es fantástico.
Besos, princesa de largos cabellos y medidas de escándalo.
TIENES UNA DESTREZA PARA CREAR IMÁGENES. FULLLL RELATO.
BESOS
Excelente relato, me ha hecho sonreir....hay sueños de los que no quisiéramos despertar jajaja.
Besitos Campoazul.
..ayy amiga..ya hasta te iba a pedir el domicilio de ese masajista jajaa..en fín, ojalá que se te vuelva aparecer en sueños, y si es así..dile que por aca al otro lado del continente. hay alguien que tambien le gustaría disfrutar de sus masajes, dile que no he tenido ningún accidente..pero que casi todo el día estoy sentada y que me urgen sus masajes..aunque sea en sueños..jajaaa.
Buen fin de semana
Besitos.
Que lastima que no fuera real, ese masajista se haría de oro jajaja. Ya me estaba yo imaginando otro final cuando llegas tu y zassss Quejica!!!! jajajaja. Pobrecina!!.
No le había leído quizás es de antes de conocernos, me ha encantado hasta me duele un poco menos la espalda de lo que me metí en el personaje jajajaja. Un bessito amiga
Ah y la foto de la cabecera es espectacular como todas las tuyas. Nena tendras que darme unas clases, va a ser algo mas que una cocacola jajaja. Un bessito enorme
¡Genial! Yo estaba a punto de pedirte el número de teléfono, cuando leo lo del calmante.
Besitos
Buenos son los sueños, pero mejor cuando éstos se tornan radicalmente en realidad. Siempre y cuando no degeneren en esas pesadillas espantosas que al final nos hacen lamentarnos de haber cenado en demasía... En cuanto a los masajes, ¿Qué te puedo contar? Son de lo mejor e independientemente de quien te los dé, si los disfrutasm son una de las mejores formas de descubrir lo sensitivo y relajante que puede suponer para nuestra vida.
Un saludazo.
Que envidia de sueños, los míos se basan todos en números y más números, en fin, precioso y relajante sueño. Saludos.
Ve a un fisioterapeuta, no seremos tan guapos, pero seguro que te cura...
Besicos
Bueno, ya tienes un seguidor mas, te espero por mi blog de vez en cuando.
Un saludazo.
por un instante.... me lo creí..
en fin...
sí quiero ser así de guapa y el masajista cachas..
Un beso
A veces es duro despertar...con un sueño así, el despertar es duro...Je ja
Un cálido abrazo Campoazul
Yo pensaba que lo importante del masaje era el tratamiento y las manos, jajaja.
Un beso.
Hola Campoazul
Ya lo creo que el masaje era terapeútico, aunque más el sueño ;).
Jjaajaja, esta noche voy a intentar soñar algo parecido, a ver si alguien me da un masajes de esos que me deja nueva y sin dolor en la espalda.
Eso si, pediré para que salga el chico guapo y no la masajista del décimo piso.
Besotes.
Hola Campoazul!!!!
Qué bien me vendría un masajista!!!!,pero el de tus sueños debe de ser genial,espera que me pongo a soñar ahora mismo,jaja.
Es un buen relato como todos los tuyos,donde nos dejas con una sonrisa,gracias!!
Un abrazo,guapa!!!
que delicia....pero los sueños sueños son....no te rindas, aveces se cumplen...besoooo
Andres
Al final los comentarios del comienzo de que si eres tú o no, me hicieron olvidar del texto... ahora querría ver ese bombonazo ;)
Un beso.
HD
Yo tampoco llevo muy bien la diferencia entre sueño y realidad. Qué le vamos a hacer.
Es una pena que no haya calmates que provoquen los sueños que más nos gusten.
Un beso.
¿Me puedes recomendar alguna masajista como la de la foto? Es que de pronto me ha dado un tirón en el cuello, ja, ja. Muy bueno el relato, conduces muy bien al lector al punto en que tu quieres, hasta el contraste con la realidad gris, que por desgracia no es como nuestros sueños.
Besos.
Y es que los sueños sueños son y nos envuelven en la magia ... lo peor es despertar de ellos cuando estamos tan agusto.
Un beso.
Interesantísimo relato, lo disfruté mucho!
Felicitaciones!
Cariños!
Tus relatos tienen
el arte del suspense
y la sorpresa,
además de un excelente
vocabulario,
es un placer leerte
un besito
ja ja me imagine que iba a ocurrir otro final. buena historia.
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